Dormir en casa de un amigo puede ser muy emocionante para los niños y los jóvenes. Este también es el caso de niños con diabetes, que deben tener las mismas oportunidades de hacerlo.

Para que los padres del amigo puedan estar tranquilos, es importante que tengan el conocimiento y la información de que necesitan, incluyendo los datos sobre cuando el niño debe medir su glucosa y tomar insulina.

Deben ser capaces de medir la glucosa y saber qué hacer por si hay algún accidente. Asimismo, deben saber cómo tratar el nivel alto y bajo de la glucosa. Es igualmente importante para el niño traer una hoja con los datos personales con números actuales de teléfono de los padres o responsables para ponerse en contacto en caso de emergencia. Pasos para pasar una noche fuera, segura y sin preocupaciones:

• Las cantidades de insulina, alimentación y el ejercicio afectan la glucosa del niño.
• Póngase en contacto siempre con los padres/tutor del niño, si la glucosa está muy alta o muy baja.
• Jamás envíe un niño solo a casa si él o ella está con bajo nivel de glucosa o si se siente raro.
• En caso de inconsciencia, no coloque nada en la boca del niño. Llame una ambulancia.
• El niño debe tener siempre algún tipo de identificación (por ejemplo, tarjeta, collar, pulsera) para indicar que éste es portador de diabetes.
• El niño debe siempre llevar consigo la glucosa, lo que ayuda rápidamente en caso de una caída en el nivel de azúcar en la sangre.
• La diabetes puede hacer que las personas se sientan incómodas en su presencia. Acúdase a un equipo médico de diabetes del niño. Es posible que puedan proporcionar consejos sobre qué es importante informar los demás.
• Informar a todos los miembros de la escuela que el niño tiene diabetes y que sepan qué hacer en el caso de un accidente.